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La Bodega González Teso, situada en El Olmo Kalea, 34, 01330 Labastida, Araba, es una joya escondida en el corazón de Álava. Este lugar no es solo una bodega más, sino una auténtica experiencia enológica que mezcla tradición, historia y un trato familiar que te hace sentir como en casa desde el primer momento.
Una Experiencia Inolvidable en Bodega González Teso
Cuando uno piensa en visitar una bodega, busca más que solo una cata de vinos. En la Bodega González Teso, los visitantes pueden disfrutar de una jornada completa que incluye la degustación de vinos excepcionales, acompañados de deliciosos aperitivos como jamón, chorizo, queso y una tortilla que hará las delicias de tu paladar. ¿Te imaginas catando un vino tinto que es una auténtica joya de la enología? Aquí, eso es posible.
El recorrido por la bodega es una aventura por túneles subterráneos que datan del siglo XIII, donde se almacenan y se dan los últimos retoques a los vinos en barricas. Este viaje en el tiempo te transporta a la época medieval, haciendo de la visita una experiencia educativa y fascinante.
Atención Personalizada y Accesibilidad para Todos
La bodega cuenta con todas las comodidades necesarias para hacer de tu visita una experiencia cómoda y accesible. Desde acceso para sillas de ruedas hasta aparcamientos adaptados, la Bodega González Teso se asegura de que todos los visitantes puedan disfrutar de sus instalaciones sin ningún inconveniente.
Suso y Lucía, los anfitriones, son personas amables y apasionadas por lo que hacen. Su atención personalizada y su conocimiento sobre el vino transforman la visita en un evento cálido y amistoso. Aunque ha habido alguna que otra confusión con las reservas, la mayoría de los visitantes salen encantados, destacando la calidad de los vinos y la amabilidad del personal.
Aunque algunos han tenido experiencias menos satisfactorias debido a errores en el sistema de reservas, la bodega se ha esmerado en mejorar este aspecto. Si decides visitarla, es recomendable confirmar tu reserva con antelación para evitar cualquier inconveniente.
Con su mezcla de vinos exquisitos, un entorno histórico y un trato cercano y familiar, es una experiencia que vale la pena vivir. ¿Te animas a descubrirla? ¡No te arrepentirás!
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