Si estás buscando una experiencia única en el mundo del vino, no puedes dejar de visitar Bodegas Araico. Situada en La Hoya Kalea, 5, en la pintoresca localidad de Eskuernaga, Álava, esta bodega familiar te ofrece mucho más que solo una cata de vinos. Aquí, el amor por el vino y la tradición se sienten en cada rincón.
Una Experiencia de Cata Inolvidable
Las catas en Bodegas Araico son verdaderamente especiales. Miguel, uno de los anfitriones, te guiará a través de un viaje sensorial. Con su pasión y conocimiento, te explicará cada etapa del proceso de elaboración del vino, desde la viña hasta la botella. ¿Te imaginas probando tres vinos excepcionales mientras aprendes sobre su historia y elaboración? Muchos visitantes destacan lo bien que Miguel explica todo, convirtiendo la visita en una clase magistral de enología.
Además, Estibaliz también se luce como anfitriona, haciendo que la experiencia sea amena y educativa para todos, incluso para los más pequeños. Si decides llevar a tus hijos, ellos también aprenderán y disfrutarán, gracias a su paciencia y dedicación. Sin duda, es una visita que deja huella y te invita a volver.
Un Lugar con Tradición y Buen Hacer
Lo que diferencia a Bodegas Araico de otras bodegas es su toque familiar y tradicional. Aquí, cada botella de vino es fruto del esfuerzo y la pasión de una familia que ha mantenido viva la tradición vinícola durante generaciones. La bodega sigue métodos algo tradicionales, lo que aporta un carácter único a sus vinos.
La atención al detalle es evidente. Desde el cuidadoso protocolo COVID hasta la generosidad de obsequiar a los visitantes con una botella de vino joven, cada aspecto de la visita está pensado para que te sientas como en casa. Y si te enamoras de alguno de sus vinos, puedes comprarlo en la tienda o incluso pedirlo a domicilio, con la comodidad de la entrega el mismo día.
¿Todavía te lo estás pensando? Las opiniones de quienes ya han visitado Bodegas Araico son unánimes: es una experiencia totalmente recomendable. No solo por la calidad de sus vinos, sino por el trato cercano y familiar que te harán sentir como parte de esta maravillosa tradición.
Así que si estás en Eskuernaga, no dudes en hacer una parada en Bodegas Araico. Te prometemos que no te arrepentirás. ¡Salud!