Bodegas Cor de Mei, situada en C. Zamudio, 11, 26221 Gimileo, La Rioja, es un rincón encantador en el corazón de La Rioja que no puedes dejar de visitar. Esta bodega familiar destaca por su ambiente acogedor y su atención personalizada, lo que la convierte en una experiencia única para todos los amantes del vino. Si buscas una bodega con encanto y carácter, este es tu lugar.
Una Experiencia Única en La Rioja
Desde el primer momento en que pones un pie en Bodegas Cor de Mei, te sientes como en casa. Las explicaciones detalladas de Ana, Susana y Alberto te sumergen en el fascinante mundo del vino, haciendo de cada visita un lujo. ¿Te imaginas conocer de cerca todo el proceso de producción? Aquí puedes hacerlo, y si tienes la oportunidad de visitarlos durante la vendimia, la experiencia se vuelve aún más especial.
El lugar, con su estilo boutique, recuerda a esos hoteles exclusivos llenos de estilo y personalidad. La bodega cuenta con un calao muy peculiar que añade un toque único a la visita. Los detalles están cuidados al máximo, desde la decoración hasta los pequeños pinchos que acompañan a los vinos, todo está hecho con buen gusto.
Vinos Que Enamoran
Los vinos de Bodegas Cor de Mei son, sin duda, el plato fuerte. El vino blanco Martina Cor de Mei es todo un descubrimiento, con sus tonos frutales dulces que conquistan desde el primer sorbo. El tinto reserva también destaca, dejando una huella imborrable en el paladar. Y para los amantes de la garnacha, este vino no se queda atrás, ¡es sencillamente delicioso!
La pasión por el vino y las antigüedades se respira en cada rincón de la bodega, lo que hace que la visita sea plenamente recomendable. No es de extrañar que muchos visitantes consideren esta experiencia como la mejor de sus vidas. ¡Un verdadero placer conocer a personas tan apasionadas y dedicadas!
La bodega está adaptada para todos: cuenta con acceso para sillas de ruedas y aparcamientos adaptados, asegurando que todos puedan disfrutar de esta experiencia sin ningún inconveniente.
Si estás por la zona o simplemente de paso, Bodegas Cor de Mei es una parada obligatoria. Con su ambiente familiar y sus vinos exquisitos, es un lugar que te dejará sin palabras. ¡No dudes en visitarla y seguirles la pista! Este tesoro en Gimileo te espera con los brazos abiertos y una copa de vino lista para ser disfrutada.