Compañía de Vinos Tricó es una bodega situada en la encantadora localidad de Porto, en la provincia de Pontevedra. Localizada en la C/ Pombal, 4, esta bodega se ha convertido en un punto de referencia para los amantes del vino, especialmente del Albariño. El negocio es conocido por su hospitalidad y la calidad excepcional de sus vinos, que han conquistado a sus visitantes.
Una Experiencia Inolvidable
Desde el momento en que llegas a Compañía de Vinos Tricó, te sientes como en casa. Los propietarios, Chus y José Antonio, reciben a los visitantes con una cálida bienvenida y una pasión palpable por lo que hacen. No solo te cuentan la fascinante historia de su bodega, sino que también te invitan a descubrir el proceso detrás de sus vinos. ¿Qué más se puede pedir?
La visita incluye una cata de sus mejores Albariños, entre los que destacan Tricó, Nicolás y Claudia. Cada uno de estos vinos sorprende por su vibrancia y larga vida en botella. Y lo mejor de todo, a un precio justo. Sin duda, es una experiencia que vale la pena repetir.
Tradición y Calidad
La bodega sigue prácticas biodinámicas, poniendo un énfasis en la calidad sobre la cantidad. Los vinos fermentan sobre lías y se envejecen en botella, lo que les otorga un carácter único. Un detalle encantador es que las etiquetas de las botellas fueron diseñadas por la madre de uno de los propietarios cuando tenía solo 10 años, representando dibujos de su aldea. Esta tradición familiar continúa bajo las manos expertas de los antiguos fundadores de Pazos de Lusco, una bodega vecina también de gran reputación.
Otro punto a destacar es la accesibilidad del lugar. La bodega cuenta con acceso para sillas de ruedas y aparcamiento adaptado, lo que facilita la visita a todos los amantes del vino, sin importar sus necesidades.
Los comentarios de quienes han visitado la bodega no pueden ser más positivos. Desde aquellos que solo hicieron una breve parada para comprar algunas botellas, hasta quienes han trabajado allí durante la vendimia, todos coinciden en la amabilidad y profesionalidad de los dueños. Chus y José Antonio han logrado crear un ambiente acogedor y familiar que se refleja en cada aspecto de la bodega.
Te llevarás no solo unas botellas excepcionales, sino también recuerdos inolvidables.