Si no tienes tiempo, lo mejor es el método de la cubitera, ya que és es muy buena conductora del frío. Consejo: si no quieres que las etiquetas se estropeen, envuelve las botellas con papel film.
Úsala si tienes más tiempo. Cuánto tiempo deberá permanecer dependerá del vino, pero calcula que el blanco puede necesitar más de hora y media, y el tinto algo más de media hora.
Pueden mejorar con esta forma de frío.
Principalmente funciona para algunos vinos blancos y rosados.
Cuanto más dulce sea el vino, más tiempo puede durar, siempre que se conserve bien.
Sobretodo, cuando vas a servir vinos por copas, y más aun si hablamos de espumosos.
Vacuvin es una pequeña bomba que aspira el aire del interior de la botella mediante un tapón a presión aplicado sobre el cuello de ésta.
El tapón de abrazadera de acero y el tapón a presión que cierra herméticamente la botella es ideal para espumosos ya que evita la pérdida de gas.
La máquina de nitrógeno es una herramienta profesional que permite espitar hasta ocho botellas saturándolas con nitrógeno según el nivel del vino va bajando, con lo que se evita la oxidación del producto.
Espacio exclusivo para bebidas, para evitar que absorba aromas por la porosidad del corcho.
Temperatura: debe ser constante, entre 10-15º.
Lugar fresco: coloca las botellas alejadas de aparatos que emitan calor. Iluminación: lo ideal son luces tenues.
Colocación: las botellas deberán guardarse en horizontal, consiguiendo que el corcho del tapón permanezca siempre húmedo y elástico.