¿Buscas una experiencia vinícola inolvidable en un entorno mágico? La Bodega Oriol Rossell, situada en Lugar Cal Cassanyes, 0 S N, 08732 Sant Marçal, Barcelona, es el lugar perfecto para disfrutar de vinos y cavas de calidad superior. Esta pequeña empresa familiar te sorprenderá con su atención al detalle y su pasión por la elaboración de productos excepcionales.
Un Paraíso Enológico en Sant Marçal
Al llegar a la Bodega Oriol Rossell, te recibirán con una cálida bienvenida. El personal es extremadamente amable y conocedor, lo que garantiza una visita enriquecedora. Mercedes, en particular, destaca por su dulzura y profesionalismo. Desde el primer momento, te sentirás como en casa.
La bodega ofrece una experiencia única, donde la tradición y la modernidad se encuentran en perfecta armonía. La decoración del lugar es exquisita, con una mezcla de elementos rústicos y modernos que crean un ambiente acogedor y elegante. Aunque te recomiendan hacer una reserva, podrás encontrar espacio en la parte trasera, donde hay asientos cubiertos y descubiertos. Eso sí, si optas por los asientos de fardos de heno, ¡lleva una manta para mayor comodidad!
Calidad y Sabor en Cada Copa
El wine bar de la bodega es el lugar ideal para degustar sus vinos y cavas. La calidad de los productos supera cualquier expectativa. Ya sea que elijas un cava brut nature, un cava rosado o su famoso vino «El carro gros», cada sorbo es una explosión de sabores. Y si buscas maridar tu bebida, la bodega ofrece deliciosos aperitivos como anchoas con pan con tomate y una pequeña, pero exquisita, tabla de quesos.
Las visitas guiadas son altamente recomendables para aquellos que deseen profundizar en el proceso de elaboración y la historia de la bodega, que se remonta a 1637. Asegúrate de pedir cita previa para no perderte esta experiencia educativa y deliciosa.
La bodega es accesible para todos. Cuenta con acceso para sillas de ruedas, aparcamientos adaptados y aseos adaptados, lo que garantiza que todos los visitantes puedan disfrutar de la experiencia sin preocupaciones.
La Bodega Oriol Rossell no es solo un lugar para degustar vinos y cavas, sino también un espacio para desconectar y disfrutar de la belleza de su entorno. Ya sea para una salida de fin de semana, un evento de team building o simplemente para relajarte, este lugar te dejará con ganas de volver una y otra vez.
¿Te animas a visitarla? ¡No te arrepentirás!