Ubicada en el corazón de la provincia de Badajoz, la Bodega Palacio Quemado es una joya oculta que merece ser descubierta. Situada en la Carretera Almendralejo-Palomas Km 6,9, 06840 Alange, Badajoz, esta bodega ofrece una experiencia vinícola sin igual, donde cada detalle es cuidadosamente atendido para proporcionar vinos de la más alta calidad.
Vinos Excepcionales en un Entorno Único
La primera impresión al llegar a Palacio Quemado es la belleza del entorno. Rodeada de viñas y olivos, la bodega se encuentra en un paisaje que parece sacado de un cuadro. Aunque el camino no está asfaltado y puede ser un poco arduo, la recompensa al llegar vale cada minuto del trayecto. Como dicen, «las prisas no son buenas», y en este caso, la paciencia es recompensada con vinos extraordinarios.
Uno de los aspectos más destacados de esta bodega es la atención al detalle. Los visitantes mencionan que el Palacio Quemado Crianza es un verdadero deleite, con aromas afrutados y un sabor suave que se acentúa con cada sorbo. Este vino es tan apreciado que muchos lo consideran el mejor de su tipo. Es conocido por ser un vino que no provoca dolores de cabeza, incluso después de disfrutar varias copas.
Una Experiencia Inolvidable
La experiencia en Palacio Quemado no se limita solo a la cata de vinos. El trato del personal es excepcional, y las visitas guiadas son altamente recomendadas. Santos, uno de los guías, es mencionado por su profesionalismo y explicaciones claras, haciendo que cada visita sea educativa y entretenida. La bodega ofrece accesibilidad para personas con movilidad reducida, incluyendo acceso para sillas de ruedas y aparcamientos adaptados.
Para aquellos que buscan llevarse un pedazo de esta experiencia a casa, la bodega ofrece precios competitivos, especialmente si se compran cajas de seis botellas. Aunque actualmente no envían a Canarias, muchos visitantes optan por comprar directamente en la bodega, aprovechando los descuentos ofrecidos.
Desde sus vinos excepcionales hasta su entorno pintoresco y el trato cálido de su personal, cada visita es un deleite. Si eres amante del vino y te encuentras en Alange, Badajoz, no puedes dejar de visitar esta bodega. ¿Te animas a descubrir este tesoro vinícola?