Enclavada en el corazón de Ronda, Málaga, la Bodega F-Schatz es una joya que todo amante del vino debería descubrir. Ubicada en la pintoresca Finca Sanguijuela, esta bodega ofrece una inmersión completa en el mundo del vino y la cultura vinícola. ¿Qué hace que esta bodega sea tan especial? Vamos a descubrirlo.
Una experiencia inolvidable
Desde el momento en que llegas, la belleza del paisaje te deja sin palabras. Las viñas de esta bodega se extienden hasta donde alcanza la vista, creando un escenario perfecto para un día inolvidable. A pesar del clima, ya sea un día soleado o lluvioso, siempre hay algo mágico en este lugar. Y si tienes suerte, el clima puede darte una tregua para explorar cada rincón de las viñas.
La visita guiada es una delicia. María y Gema, dos de las guías más destacadas, te llevarán a través de la rica historia de la bodega y el proceso de elaboración del vino. María, con su experiencia y paciencia, y Gema, con su entusiasmo y amabilidad, hacen que cada explicación sea fascinante y fácil de entender. ¿Y la cata de vinos? Simplemente divina. Los vinos, acompañados de un toque de gastronomía local, son una explosión de sabores que no querrás perderte.
Accesibilidad y comodidad
La Bodega F-Schatz no solo se destaca por la calidad de sus vinos y la belleza de su entorno, sino también por su compromiso con la accesibilidad. La bodega cuenta con acceso para sillas de ruedas, aparcamientos adaptados y aseos accesibles. Esto asegura que todos los visitantes, sin importar sus necesidades, puedan disfrutar plenamente de la experiencia.
El camino de entrada está bien adaptado para coches bajos, lo que facilita el acceso sin inconvenientes. La atención al detalle es evidente en cada rincón de la bodega, lo que hace que la visita sea cómoda y agradable para todos.
La combinación de una ubicación impresionante, guías apasionadas y vinos exquisitos, hacen de esta bodega una experiencia única. No te vayas de Ronda sin visitarla. ¡Te prometemos que querrás repetir!